La relación entre Jimmy Butler y el Miami Heat atraviesa un momento crítico, marcado por una segunda suspensión en menos de un mes, su solicitud de traspaso y comportamientos que el equipo ha calificado como “perjudiciales”.
Estas circunstancias generaron interrogantes sobre el futuro del jugador en la franquicia de Florida. Cada situación lo aleja más al seis veces All-Star de vestir la camiseta del equipo.
El miércoles, Miami Heat anunció que Butler sería suspendido por dos partidos debido a no seguir las reglas del equipo.
“Hemos suspendido a Jimmy Butler por dos juegos por seguir sin respetar las reglas del equipo, conducta insubordinada y conducta perjudicial para el equipo, incluida la pérdida del vuelo del equipo de hoy a Milwaukee”, confirmó la franquicia a través de su cuenta oficial de la red social X.
La sanción llegó después de que Butler se ausentara al vuelo programado para el enfrentamiento del jueves contra los Milwaukee Bucks. Esta suspensión se suma a otra previa, impuesta durante la primera quincena de enero, cuando el jugador fue apartado por siete partidos.
En ese momento, la organización indicó que su conducta había sido un problema “en el transcurso de la temporada y particularmente en las últimas semanas”, según informó la agencia de noticias Reuters.
La situación generó tensiones dentro de la plantilla y el cuerpo técnico, aunque Erik Spoelstra, entrenador del Heat, se mostró contundente al intentar restar dramatismo a los hechos.
“Lo que le dije a nuestro equipo es que hay que acostumbrarse. Supérenlo. Así es la vida en la NBA, es la vida que elegimos”, afirmó Spoelstra en declaraciones recogidas por Reuters.
Por su parte, Tyler Herro, compañero de equipo de Butler, expresó su opinión con una mezcla de resignación y apoyo, a pesar de que para él “no había mucho de qué hablar”.
“Probablemente no sea fácil trabajar con alguien que va a estar en cualquier puesto de trabajo. Amamos a Jimmy; nos encantaría que estuviera aquí. Amo a Jimmy”, dijo Herro.
El equipo ha intentado mantener la concentración en los partidos pese a la distracción que representa la incertidumbre sobre Butler. “Se necesita fortaleza mental y compromiso en cuanto a la tarea que tenemos por delante”, declaró Spoelstra.
Además de los problemas internos, las fechas de los partidos del Heat coincidieron con un torneo de pádel en Miami, en el que Butler figura como presidente honorario y co-capitán.
Según AP, la empresa de café del jugador, Big Face, también está involucrada en el evento, lo que ha generado preguntas sobre su nivel de compromiso con el equipo.
El entrenador Spoelstra y el resto del equipo han adoptado una postura de resiliencia mientras intentan navegar por este período complicado. A pesar de los obstáculos, Spoelstra reiteró: “Tenemos suficiente continuidad, sabemos cuál es nuestra identidad en este momento”.
Detrás de estas tensiones se encuentra una solicitud de traspaso que Butler hizo de forma privada al equipo en las últimas semanas.
Según la agencia de noticias AP, aunque Butler evitó declarar públicamente su deseo de salir de Miami —debido a las reglas de la NBA que imponen multas de hasta 150.000 dólares por hacerlo—, el Heat reveló esta intención cuando anunció su primera suspensión en enero.
Cuando se hizo pública la intención de Butler, Pat Riley, presidente del Miami Heat, expresó que no consideraba la posibilidad de desprenderse de uno de los principales jugadores del equipo.
Sin embargo, tras la primera suspensión del alero, Riley cambió su postura y señaló que la organización estaba abierta a recibir propuestas de intercambio.
“A través de sus acciones y declaraciones, ha mostrado que ya no quiere ser parte de este equipo. Jimmy Butler y su representante han indicado que desea ser traspasado y, por lo tanto, escucharemos ofertas”, afirmó el Miami Heat en un comunicado del 3 de enero levantado por la agencia de noticias EFE.
La fecha límite de traspasos, fijada para el 6 de febrero, podría marcar el final de la relación entre el equipo y Butler. Hasta ahora, no se ha concretado ningún movimiento, y la incertidumbre sobre su destino permanece.