En un nuevo capítulo de sus memorias, Cher reveló una de las anécdotas más extrañas y divertidas de su vida en Hollywood. La estrella de la música y el cine recordó con asombro y humor el día que, en compañía de su entonces novio David Geffen, llevó a dos figuras legendarias del rock, John Lennon y Harry Nilsson, a la emblemática mansión Playboy. Lo que parecía ser una noche tranquila de cine y entretenimiento en la mansión de Hugh Hefner se transformó rápidamente en una de esas historias que solo los excesos de la fama pueden producir.
La anécdota, que la artista de 78 años comparte en la primera parte de su libro Cher: The Memoir, no solo es una mirada a los momentos de diversión y descontrol, sino también una visión más humana de Lennon, lejos de su imagen de mito musical. En su relato, la cantante describe con detalles vívidos cómo la presencia de Lennon y Nilsson transformó la mansión en un escenario de risas y situaciones absurdas, todo bajo el influjo del alcohol.
Según revela la artista, la noche comenzó cuando ella, estando en un bar, se cruzó con Harry Nilsson, quien le comentó que Lennon estaba “muriendo por ver la mansión Playboy”. Accediendo a su petición, Cher organizó la salida, sin sospechar lo que sucedería después. Lo que debía ser una velada relajada en el famoso cine privado de la mansión se desbordó rápidamente cuando Lennon y Nilsson llegaron ya bastante ebrios, y lo que siguió fue una serie de momentos descontrolados que Cher nunca olvidaría.
Una vez en la mansión, la cantante pronto se dio cuenta de que sus invitados estaban más borrachos de lo que había imaginado. Lennon y Nilsson comenzaron a hacer el ridículo, riendo descontroladamente mientras imitaban acentos ingleses de forma cómica, coreando el nombre de Hefner con una especie de canto, “Hef! Hef! Hef!”, aunque con tan marcado acento que sonaba más como “Huff! Huff! Huff!”. Cher, que observaba la escena con una mezcla de incredulidad y vergüenza, se sintió rápidamente acomplejada por la actitud de los dos músicos.
En su relato, la cantante destaca lo incomodada que se sintió al ver cómo ambos, entre risas y tropezones, se adentraron en la famosa Gruta, una especie de cueva natural dentro de la mansión que se conecta con la piscina. Pero lo peor estaba por llegar: “Riéndose y cayéndose uno encima del otro, John y Harry me siguieron hasta el jardín. Los senté dentro de la infame Gruta, que era como una enorme cueva en la que se adentraba un extremo de la piscina. Fui a buscar algo para beber y cuando regresé estaban parados en el medio de la Gruta desnudos, pero todavía en el agua, gracias a Dios”, relata Cher en su libro.
La situación se fue tornando cada vez más absurda y cómica cuando ambos músicos, entre amenazas de seguir deambulando desnudos por la mansión, comenzaron a despojarse completamente de sus ropas. Cher, incapaz de tomar la situación en serio, intentó frenéticamente que se vistieran nuevamente, describiendo la escena como “como arrear borrachos”. Según cuenta, le llevó un largo tiempo convencerlos de ponerse la ropa, mientras ellos seguían insistiendo en mostrar su desnudez por la mansión.
Este episodio en la mansión Playboy no fue el único momento de irreverencia que vivieron Lennon y Nilsson durante esa época de sus vidas. En los años 70, ambos músicos compartieron una amistad cercana, marcada por frecuentes borracheras y situaciones que, al día siguiente, se convertían en escándalos de prensa. Según informes, John Lennon atravesaba una etapa complicada tras su separación de Yoko Ono, y el alcohol parecía convertirse en una constante en su vida. Fue en este contexto que, junto a Nilsson, se vio involucrado en varios incidentes que no tardaron en ocupar las portadas de los diarios.
Cher no dudó en relatar esta experiencia, considerando que la vida de Lennon en esos años estaba marcada por una especie de caos controlado, un torbellino de excesos que lo alejaban de su imagen pública como el intelectual y revolucionario que el mundo conocía. A través de su relato, Cher ofrece una visión más cercana y menos glorificada del hombre detrás de la leyenda, mostrándolo en sus momentos más humanos y vulnerables.
La cantante, que a lo largo de su vida ha sido testigo de innumerables historias y personajes del mundo del espectáculo, siempre ha tenido una forma única de capturar esos momentos. Cher: The Memoir no solo es un repaso de su carrera, sino también un testimonio de las experiencias que marcaron a una de las artistas más emblemáticas del siglo XX. En sus memorias, Cher promete seguir desvelando episodios sorprendentes y reveladores de su vida personal y profesional, con un estilo honesto y sin filtros.