El ministro de Economía, Luis «Toto» Caputo, aseguró este jueves que el dólar tarjeta, también conocido como dólar turista, «va a bajar» en su cotización y auguró el fin del cepo cambiaron para el 2025, «sin duda».
Actualmente, el dólar turista está conformado por el 30% del impuesto PAIS y una percepción del 30% sobre el Impuesto a las Ganancias.
«El dólar turista va a bajar. La mayoría de la gente paga la cancelación del Impuesto País con dólares, y no con pesos. No nos van a vaciar el Banco Central por eso. Y el dólar tarjeta va a seguir algo más alto que el oficial«, agregó el titular del Palacio de Hacienda, venerado últimamente por Javier Milei.
Por otra parte, fue consultado sobre cuándo se levantará el cepo. «Se están dando algunas de las convergencias que nosotros buscamos», precisó en sintonía con los postulados que anticipó el propio Presidente este miércoles. Caputo avanzó tímidamente en plazos y agregó que «será en el 2025, sin duda».
No obstante puso un reparo en una variable que falta. «Aunque no una de ellas, que es el nivel de reservas del Banco Central, porque si bien se compró muchísimo, debimos hacer muchos pagos. Cuando se den esas condiciones, en el 2025, se va a levantar».
«No hay apuro porque el dólar blue ya está convergiendo con el oficial, el país está creciendo (y lo hará al 5% o más) y porque estamos logrando inversiones a largo plazo, y a quienes lo hacen, no les importa el corto plazo», se entusiasmó el ministro.
Respecto de otra política cambiaria que el Gobierno anunció, el fin del Impuesto País desde diciembre, Caputo aseguró que «eso beneficia a los que no pueden viajar a comprar cosas más baratas, y al Gobierno también, porque esos viajes comprenderían una mayor demanda de dólares».
«También es una alerta para las empresas, porque deberán bajar la vara, porque habrá mayor demanda… Habrá que competir«, advirtió, con el trasfondo de los cambios en el régimen de las compras puerta a puerta.
Caputo explicó que el Gobierno analiza bajar impuestos y retenciones si se dan algunas variables favorables a la política económica. «El mercado convalida la inflación de 18% anual que proyectamos para el año próximo, y el país crecerá un 5% de su PBI. El crecimiento nos permitirá bajar impuestos y retenciones al campo, cuando tengamos el superávit necesario», anticipó.
Pero, en una suerte de enredo, aclaró: «Si lo hiciéramos ahora, tendríamos déficit al mes siguiente, necesitaríamos emitir, y ahí volvería Cristina Kirchner y se iría todo al demonio«.
El ministro se mostró conforme con el rumbo económico que atraviesa el país. «Que la inflación mayorista en octubre haya sido de 1,2% es un alegrón. Estamos en niveles que hace un año o meses atrás eran impensados. La clase media la está peleando, pero todos los números confirman que vamos por el camino correcto. Durante los últimos seis meses los salarios le ganaron a la inflación», expuso en una prédica habitual del discurso oficial entusiasmado.
Caputo también habló de la posibilidad de recurrir al Fondo Monetario Internacional, un tema que expuso como opción Milei tras sus reuniones con Kristalina Georgieva.
«Con el FMI hemos empezado a hablar informalmente sobre un nuevo programa al que, si llegáramos, eso significaría un desembolso de plata. Estamos estudiando cómo entraría esa plata. Estamos planteándole nuestra política económica y cambiaria», sostuvo.
Luis Caputo, de Victoria Villarruel a Cristina Kirchner y Axel Kicillof
A un día de que el Presidente declarara que la Victoria Villarruel no tiene injerencia en las decisiones gubernamentales, el ministro de Economía se refirió a la divisoria entre ambos.
«Con Villarruel no tengo casi relación. Estamos en dos extremos distintos: yo en el Ejecutivo y ella en la parte institucional. Pero el Presidente dijo cosas que son ciertas, como que Villarruel no participa de las decisiones ejecutivas, tampoco de las reuniones de Gabinete. Ella venía muy poco a las reuniones. Villarruel lidia con la casta… es casta, pero con el Presidente tienen la relación institucional que deben tener«.
Caputo se despachó más cuando le dieron pie para hablar del kirchnerismo. «Alberto Fernández es el presidente que dejó la peor herencia de la historia. Ahora, no sé si mandaba él. Y Cristina Kirchner fue la gran responsable de los peores gobiernos que ha visto Argentina, y también de la corrupción».
Hubo una mención a la expresidenta cuando le consultaron a Caputo cuándo bajará impuestos. «Nosotros pisamos sobre seguro. Vinimos a bajar la inflación, impuestos y retenciones pero no le sirve a la gente ni al campo de tomar pasos imprudentes porque si nos sale mal el riesgo de equivocarse es muy alto”, introdujo.
«Si bajo el impuesto al cheque y bajo las retenciones empiezo a correr déficit al mes siguiente. Entonces se desancla el programa, la gente va a decir ‘chau, sonamos’ porque no se van a poder financiar [el Gobierno] y tener que emitir, vuelve Cristina y se va todo al demonio”, sintetizó Caputo.
Enseguida en la conversación en TN sobrevoló lo que sucedió en las PASO 2019 cuando Mauricio Macri era el Presidente. el actual ministro había sido su titular del Banco Central hasta 2018 en medio de aquella crisis financiera que provocó que en dos años el dólar pasara de $ 17 a casi $ 60 tras la elección de internas. En el medio, una encuesta que dio con posibilidades a Cristina Kirchner de ganar las elecciones generó turbulencia en los mercados. Caputo se refería a ello al decir “vuelve Cristina y se va todo al demonio”.
Por último, no dejó afuera de sus críticas al gobernador de la Provincia aseguró: «Axel Kicillof… mamita. El peor ministro de Economía y el peor gobernador de la historia. Toda la debacle del kirchnerismo viene desde sus funciones como ministro».
DS