El Gobierno ha anunciado recientemente una serie de medidas que buscan facilitar las compras en el exterior a través del sistema courier y reducir los impuestos a las importaciones. Estas decisiones, que entrarán en vigor a partir de diciembre, han sido recibidas con diversas reacciones tanto positivas como negativas por parte de diferentes sectores de la sociedad.
El ministro de Economía, Luis Caputo, fue el encargado de comunicar estas novedades a través de su cuenta en la red social X. Según lo anunciado por el Gobierno, el límite para las compras en el exterior vía courier se ampliará de los actuales 1.000 dólares a 3.000 dólares por envío.
Además, se implementará una exención de aranceles para importaciones de uso personal hasta los 400 dólares, lo que significa que solo se pagará el Impuesto al Valor Agregado (IVA) por estos productos.
La ampliación del límite para las compras en el exterior vía courier es una medida que busca alinearse con las prácticas de otros países de la región. Por ejemplo, Brasil y Chile ya tienen un límite similar de 3.000 dólares, mientras que en Colombia y Perú el límite es de 2.000 dólares.
Esta medida del Gobierno permitirá a los consumidores argentinos acceder a una mayor variedad de productos a precios más competitivos, especialmente en épocas de alta demanda como las fiestas de fin de año. La exención de aranceles hasta los 400 dólares es otra medida significativa.
Actualmente, los productos importados a través del sistema courier están sujetos a diversos impuestos y tasas, lo que encarece considerablemente el costo final para el consumidor. Con esta nueva disposición, se espera que los precios de productos como ropa, juguetes y pequeños electrodomésticos sean más accesibles para los argentinos.
Impacto
Estas medidas tienen un doble objetivo. Por un lado, buscan aliviar la carga económica sobre los consumidores, permitiéndoles acceder a productos de mejor calidad y a precios más bajos. Por otro lado, se espera que estas facilidades impulsen el comercio y la actividad económica, especialmente en el sector de las pequeñas y medianas empresas (pymes), que podrán importar insumos, repuestos y piezas necesarias para su producción de manera más ágil.
Sin embargo, no todos los sectores han recibido estas noticias del Gobierno con entusiasmo. Los industriales y comerciantes nacionales han expresado su preocupación por el impacto que estas medidas podrían tener en sus ventas. Argumentan que la competencia será desleal, ya que los productos importados estarán sujetos a menos impuestos que los productos fabricados localmente.
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